La Asociación Gas Licuado ha elaborado un dossier divulgativo para dar a conocer dos fuentes de energía renovables entre el público general y profesional: el bioGLP y el rDME, que responde a las siglas del dimetiléter renovable. Estos dos biocombustibles, producidos a partir de vías renovables, tienen por objetivo apoyar la descarbonización de la economía en calefacción, transporte y aplicaciones industriales.
El contexto actual requiere de soluciones renovables, cuya adopción gradual pueda ser rápida, pero a la vez técnica y económicamente viable. Todos estos requisitos los cumplen tanto el bioGLP como el rDME, lo que los convierte en aliados para conseguir una reducción de emisiones inmediata.
Por un lado, el dossier introduce el bioGLP, que es un biocombustible producido a partir de materias primas orgánicas y renovables. Es una energía renovable y sostenible que tiene la capacidad de acelerar la transición energética: favorece la descarbonización, asegura el abastecimiento debido a su alta disponibilidad y garantiza el ahorro económico del consumidor. Igualmente, su facilidad de transporte, almacenaje y producción permiten que el cambio de los gases convencionales al BioGLP pueda producirse sin necesidad de grandes inversiones.
El dimetiléter renovable (rDME), por su parte, es también una energía de combustión limpia, segura y que contribuye a alcanzar los actuales objetivos climáticos. A diferencia de otros combustibles, el rDME se puede utilizar directamente en calderas, quemadores o motores, o se puede mezclar con otros gases líquidos; y al igual que el BioGLP, no hay necesidad de cambiar la tecnología actual.
Además, la producción del bioGLP y del rDME permite dinamizar los entornos rurales y luchar contra la despoblación, mediante la generación de puestos de trabajo en nuevos ámbitos de actividad. Los hogares, empresas e industrias ubicados en zonas rurales y fuera de la red, podrían recurrir a este tipo de energía sin necesidad de nuevas inversiones; contribuyendo al crecimiento económico y, en última instancia, creando la energía renovable necesaria para alcanzar el objetivo de neutralidad climática.
Estas fuentes de energía renovables están actualmente en una fase incipiente de su desarrollo, por lo que requieren de un marco normativo favorable para alcanzar su máximo potencial. Desde la asociación, se incide en la importancia de reconocer el bioGLP y el rDME como soluciones innovadoras que pueden contribuir a que la transición ecológica sea rápida y asequible. Se propone, de esta manera, la posibilidad de subvencionar estas energías, generar más financiación para la investigación o asesorar a consumidores y empresas sobre las ventajas que ofrecen estos combustibles, entre otras ideas.
La producción de estas energías supone una oportunidad para las regiones que han apostado por el desarrollo de soluciones de economía circular como vector de crecimiento económico, como es el caso de España. La confluencia de una sociedad comprometida, un apoyo institucional favorable y unas empresas del sector proactivas ayudarían a la descarbonización y la mejora en la calidad del aire, con lo que nos acercaríamos cada vez más al objetivo de neutralidad climática.
Descárgate aquí el dossier para conocer en mayor profundidad los beneficios y usos de estas energías.